lunes, 4 de agosto de 2008

Vuelta al cole I

Hoy volví al cole, o en mi caso el trabajo, curro, laburo o como cada cual quiera referirlo, aunque tengo aún dos vueltas más al cole, la tercera sin duda será la más dura, dejáre atrás 10 maravillosos días en Londres con Bea, el Notting Hill Carnival, mi cumpleaños y la supercelebración que haremos allá ;), y un conciertazo de REM, aparte Bea piensa correr la marathon de Londres, y yo me he ofrecido para el avituallamiento, pero mirando claro... que una no está para prepararse físicamente de aquí a unas semanas, jajaaa.

Lo llamo vuelta al cole porque así lo siento, recuerdo aún la emoción del reencuentro tras las vacaciones, el olor de los lápices, pinturas, cuadernos y libros... tan nuevo todo, la mochila nueva a estrenar, la ropa nueva... las aventuras de las vacaciones que compartir, los juegos retomados y los nuevos juegos..., pero esta vuelta al cole ha ido variando con los años: el pupitre es ahora una mesa de despacho, con un ordenador que ni podíamos soñar de niños, con papeles encima que no invitan a jugar ni colorear, sino que ganas dan de salir corriendo al verlos, y sobre todo esos amiguitos, con los que jugar en el recreo o tomar café ahora... se han evaporado, hay gente sí, pero la puedes ver fuera del trabajo igual, y las caras conocidas, amables o no.. se tornan rutinarias... nada invita a la excitación ni la aventura... pero la emoción de la vuelta, sigue en mí, intacta, pese a todo.

Pero a lo que iba, será una vuelta al cole corta, porque la próxima semana pongo rumbo a Formentera, un grupo de amigas están allí esperándome ya..., y estoy muriendo por aterrizar en Ibiza, coger el ferry y pisar tierra formentereña..., descansar en sus playas, en ese ambiente hippy aún hoy en día relativamente bien preservado, donde el bikini, pareo y havaianas serán un año más mis compañeras de viaje y de aventuras, porque ahí se sale a las 12 del mediodía, y regresas con el mismo look a las tantas de la madrugada..., te asilvestras entre sus playas de arena maravillosas, sus paisajes de postal y su aire bohemio...

Pero hasta entonces debo trabajar, volver a aterrizar en la oficina, en los tejemanejes, en los temas que surgen, los problemas, las noticias y novedades..., sobre todo posibles cambios que me podrían afectar mucho y mal en septiembre, tras mi tercera vuelta al cole.

Pero eso será entonces, ahora sólo me queda disfrutar al máximo la semana de vuelta al cole, y preparar desde ya mi maleta para Formentera... sin pensar en la vuelta al cole II la semana siguiente... y otra vez no volveré a encontrarme con mi pupitre, ni mis amigas, ni nada parecido...

1 comentario:

Anónimo dijo...

todo lo que sirva para estar bien es bueno

un abrazo